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martes, 4 de octubre de 2011

Reseña "Charla de literatos"

El creacionista del día.  Lupita G. Fass

Miércoles 27 de septiembre de 2011


La Sala Rodríguez de Alconedo sirvió como marco para finalizar la serie de entrevistas programadas en la Casa de la Cultura para este mes patrio. El recinto se veía como siempre deslumbrante, con sus cortinas bien lavadas en color verde con madroños beige en las orillas. Los candiles refulgentes, brillaban como estrellas tintineantes. Pero lo que la mayoría de los asistentes veíamos de cuando en cuando eran las pinturas del techo con mensajes victoriosos. Los decorados de las marquesinas se antojaban encajes europeos. Los pisos y la parte inferior de los muros revestidos con madera bien lustrada; no dejábamos de sentir el olor del nogal y la caoba que todavía conserva el recinto.


En esta charla, los escritores Carlos Alatriste y Gerardo Oviedo, comentaron sobre la obra de Oviedo.


Las preguntas que Alatriste formuló a Oviedo fueron muy precisas y de gran ayuda especialmente para quienes estamos ansiosos por recibir las palabras y consejos de los grandes. Lo que más llamó la atención a la audiencia, fueron las palabras de Oviedo al decir que hay que escribir con sencillez y transparencia, teniendo muy claro lo que se quiere decir, no estar peleados con el humor porque en la literatura no todo es tragedia. Otro de los puntos importantes que se comentaron fue sobre la precisión y cuidado de lo que se quiera publicar.




Por último, cabe mencionar que no faltaron los fotógrafos amateurs; alumnos del maestro Oviedo, quienes con sus celulares, desde nokia, hasta i pods, no dejaban de tomarle fotos a su profe; asimismo fotógrafos profesionales con sus cámaras sofisticadas de un millón de pixeles buscaban los mejores perfiles de los escritores, lo malo era que no dejaban apreciar bien la belleza de Oviedo y la simpatía de Alatriste.









ALMA DE ESCRITOR

El creacionista del día. Marcela Patricia Vélez Díaz





Ilusionistas, 
nacimos en la pluma del quetzal
de la palabra al vuelo,
embaucadores,
peregrinos de ciudades invisibles,
cazamos mariposas, vendemos sinfonías,
soñamos cuentos en la palma de la mano, 
rebeldes, apasionados, 
abrimos el telón de la locura, 
místicos, 
bebemos el sueño de los dioses 
atrevidos 
demonios que danzan sin caretas,
al rumor del oleaje 
nos cubrimos de oro ensortijado 
y en silencio nos besa la poesía, 
guerreros, 
tenemos siete vidas y mil noches 
alquimistas, 
abrimos las ventanas de la luna

fantasmas,
encendemos la vela del misterio,
una página en blanco, espera...